DESPUÉS DE LAS RUPTURAS
Luis Eduardo Aute
Después de las rupturas,
iniciada la tibia mansedumbre que sobrevive,
brasas primeras del atardecer premonitorio
en el hervor de las memorias.
Ahora en horas de escasos segundos
empiezan las piedras a ser mortales
y el viento, como insultos cansados,
debilita el paisaje.
Después de las rupturas,
exánimes, se rompen ellas mismas,
una a una.